Escupir al cielo
Al más puro estilo de una road movie, este montaje pretende enganchar al espectador desde su inicio hasta el final.
Una historia que arranca con dos personajes poco corrientes cuyo pasado es casi mejor no conocer. Unos parias que deciden embarcarse en una huida hacia delante, hacia un futuro que se torna sórdido, casi macabro y en ocasiones hilarante. En su encierro en la vieja estación de servicio conoceremos sus verdaderas personalidades y su no tan sólida relación.
Teatro en estado puro, suspense y cine, para dar forma a un texto cuyo desenlace solo puede ser uno.
Un hombre y una mujer de edad madura rasgan la noche de una solitaria carretera secundaria sobre una vieja motocicleta. La exhausta máquina necesita rellenar su pequeño depósito de gasolina y la luz difusa de una estación de servicio promete la ayuda que se necesita. Mientras el hombre echa el combustible, la mujer ha entrado en la cochambrosa tienda de la gasolinera para reponer fuerzas con algún dulce. Un inesperado e inexplicable acto de violencia se desata y acaba con la mujer sujetando la caja registradora y un cadáver a sus pies. El hombre y la mujer se ven forzados a encerrarse en la pequeña gasolinera fingiendo normalidad e intentando que los inoportunos e inusualmente frecuentes clientes que aparecen esa noche no descubran la realidad.